Yoga y Flexibilidad

 

5 beneficios del yoga que van más allá de estirar tu cuerpo

Te explicamos los diferentes aspectos del yoga que no solo te aportarán flexibilidad, sino también te ayudarán a mejorar tu calidad de vida diaria

El yoga es una especialidad tan enriquecedora que debería formar parte de cualquier rutina de entrenamiento, independientemente de si corres maratones, practicas ciclismo o realizas entrenamientos de alta intensidad. Pero aunque muchas personas crean que el yoga únicamente les puede aportar una mejora de su flexibilidad, nosotros hoy estamos aquí para explicar los demás beneficios que puede aportar.

1. Te ayuda a mejorar tu postura

Aquellas personas que pasan largas horas cada día sentadas delante del ordenador, tienen más facilidad de padecer una aceleración de la Sarcopenia, que se conoce como la pérdida degenerativa de masa muscular y fuerza al llevar una vida sedentaria. Principalmente, las zonas del cuerpo más afectadas son los glúteos, las caderas, el pecho, los hombros o la parte superior de la espalda.

El yoga ayuda a fortalecer, realinear y estirar estos músculos y por consecuencia, mejorar la postura. Mantener una postura correcta evita lesiones, dolores musculares o problemas en la columna, además de favorecer la respiración y disminuir el cansancio o la fatiga crónica.

2. Calma tu mente

Los beneficios mentales del yoga pueden ser tan importantes como los físicos y, después de una sesión, ya empiezas a notarlos… ¡imagínate a largo plazo! Está demostrado que mejora la concentración, reduce el estrés, incrementa la memoria y la capacidad de aprendizaje o te ayuda a ser más consciente de ti mismo debido al enfoque de autoconocimiento que desarrolla el yoga.

3. Mejora tu sueño

El hecho de realizar ejercicio está demostrado que ya ayuda a conciliar el sueño y dormir mejor por las noches, pero existen algunos estilos y posturas de yoga que son bien conocidas por mejorar la calidad del sueño dado que aumentan los niveles de melatonina, la hormona reguladora del reloj interno.

Uno de los estilos que puede ayudarte a conciliar tu sueño es el yoga restaurative, idóneo para recuperarse después de un día lleno de estrés. Entre las posturas, recomendamos aquellas que sean invertidas, como la Viparita Karani (muy sencilla, con las piernas y glúteos apoyados en la pared) o la Balasana (postura del embrión).

4. Aumenta tu flujo sanguíneo

Una circulación sanguínea saludable es el mejor remedio para prevenir posibles enfermedades cardiovasculares. Aquellas personas que siguen un ritmo de vida sedentario, el yoga puede ser el aliado perfecto para evitar los efectos de una mala circulación: inflamación de las piernas, fatiga crónica o incluso pérdida de cabello.

Para recuperar un flujo sanguíneo adecuado, puedes empezar realizando una clase de yoga a la semana y, además, realizar algunas posturas en casa por tu cuenta. Si sigues notando los síntomas de una mala circulación, prueba por aumentar tus sesiones de yoga y notarás los cambios rápidamente.

5. Entrena tu equilibrio y coordinación

Este aspecto es especialmente recomendado para aquellas personas que practican especialidades deportivas como correr, ciclismo, nadar o levantar grandes pesos, porque el yoga puede ayudar a corregir desequilibrios del cuerpo causados por un entrenamiento repetitivo en donde algunos músculos trabajan en exceso y otros son prácticamente ignorados.

Ahí es donde el yoga aporta equilibrio a nuestros músculos y huesos para evitar lesiones y mejorar la postura, además de aumentar la flexibilidad.

  Flexibilidad y Yoga.

Y los orientales tenían razón, tal como dice este antiguo aforismo chino:"El roble es fuerte y duro, y es arrancado por el viento. El junto es flexible y blando, y permanece."

En lo que se refiere a todos los últimos estudios sobre flexibilidad en el ser humano, el resultado es el mismo: las técnicas basadas en la relajación superan en mucho a los ejercicios forzados.

En el adulto, la flexibilidad es más una cuestión de relajación que de esfuerzo.

Por supuesto que las articulaciones tienen que mantenerse bien, no hay nada mejor que la circulación y la movilización de las mismas, junto a un aporte adecuado de micronutrientes de alimentos naturales para que el cuerpo pueda regenerar los tejidos.

Entonces, si queremos mejorar nuestra flexibilidad y movilidad en piernas y cadera, empezaremos masajeando profundamente toda la musculatura con pelotitas de tenis y nuestras manos hasta sentir la relajación muscular de forma inconfundible.

Es importante ir relajado a las posturas de estiramiento para facilitar la relajación y mantener unos segundos, permitiendo que se modifique el freno mental y ayude a aflojar tendones, ligamentos y la apertura de articulaciones. Por ejemplo si hacemos una abertura de piernas en "v" y nos vamos hacia una pierna de costado. No es importante si llegamos o no, sino la postura en sí.

En esa posición nos quedamos, relajando conscientemente todo el cuerpo. En cada exhalación relajamos un poco más los músculos, como si se estuvieran desinflando.

Nos quedamos unos dos minutos sobre cada pierna y terminamos nuevamente masajeando piernas y cadera.

Al comienzo no se notará demasiado el cambio, pero a medida que pasan los días veremos como la flexibilidad y movilidad irán aumentando de manera firme y reconocible.